Quiénes somos

Nací en Salamanca, mi padre era psiquiatra y viví intensamente su profesión, dedicación, esfuerzos y evolución. Él siempre tuvo consulta privada, comenzó su ejercicio como psiquiatra con su consulta en una calle del centro de Salamanca, dónde también vivíamos. Más tarde, nos mudamos al paseo de la estación, allí el decoró la consulta con su buen gusto por lo clásico.

Se planteó volver a la Universidad de Salamanca y peleó por su Cátedra de Psiquiatría, compatibilizando el ejercicio privado, con el público y preparando de modo formidable su oposición, concienzudamente, restándole horas al sueño y al descanso merecido.

Mientras, yo realizaba mi especialidad bajo la dirección del programa del Hospital Clínico y Psiquiátrico, que integraba el Dr. Ledesma, entonces Jefe del Servicio de Psiquiatría.

Con la lectura fresca del apasionante temario de mi padre, el Dr. Prieto Aguirre, me presenté a la oposición de Psiquiatras del Hospital de la Diputación de Salamanca, obteniendo la plaza. Tuve la oportunidad de trabajar y aprender unos años bajo la dirección del Dr. Basabe Barcala, de quien aprendí terapias psicoanalíticas breves, era un estudioso y gran trabajador.

Poco después la psiquiatría de la diputación de salamanca, pasó integrarse en el SACYL y allí, he trabajado en diferentes secciones con la intención de conocer cada una de ellas en profundidad, desde los sectores rurales – con sus viajes semanales – hasta los consultorios de salud mental de la ciudad y las guardias en el hospital clínico.

Durante estos años, también tuve la oportunidad de realizar mi tesis doctoral, sobre los rasgos de personalidad en población española, bajo la dirección del profesor Pérez Urdániz, persona extremadamente culta, gran docente y experto en trastornos de personalidad. Ello me facilitó el acceso a la docencia en la Facultad de Medicina, disfrutando de las materias y del contacto con los alumnos.

Otra de mis más queridas facetas profesionales ha sido la Investigación en Psiquiatría bajo la dirección del Dr. Montejo en el Grupo de Neurociencias del Ibsal, en el cual continúo y en el que hemos podido abordar desde la depresión y los trastornos de ansiedad, hasta las psicosis y ahora, más centrados en las enfermedades neurodegenerativas, como el deterioro cognitivo incipiente y la enfermedad de Alzheimer.

Todo ello me ha enriquecido, llenado,impulsado a trabajar intensamente y a amar mi profesión.